lunes, 26 de junio de 2017

MUESTRAS I



[…] es preciso amoldar la práctica docente a la diversidad de metas, anhelos y estilos que albergan diferentes estudiantes en nuestras aulas (…) y para ello el profesor de lenguas debe convertirse en agente activo de la enseñanza individualizada y en prestidigitador del aprendizaje colectivo e individual.
(Ortega, 2009, p. 25) [La negrita es nuestra]

Este fragmento que recoge en pocas palabras cómo debe ser un profesor ELE. En numerosos trabajos de diferentes asignaturas hemos tenido que tener en cuenta todos y cada uno de las acciones que debe cumplir, tales como: organizar situaciones de aprendizaje y evaluarlo, implicar a los alumnos, facilitar la comunicación intercultural, etc. No olvidemos que también debemos diagnosticar y atender las necesidades de los alumnos, sabemos que cada alumno es único y tiene sus propias necesidades.
Cumplir con este perfil  contribuirá a mejorar la enseñanza y el aprendizaje del español, una lengua que ocupa el segundo puesto por número de hablantes nativos, y que hoy estudian 18 millones de personas en todo el mundo.

En un principio, la lista del “buen profesor de español” me resultó complicada en el sentido de que consideraba que era imposible llevar todas y cada una de las premisas a cabo, sin embargo, tras todos los trabajos realizados y, algunos de ellos, llevados a la practica, durante mi periodo de prácticas docentes, las cuales están teniendo lugar durante esta semana, me he dado cuenta de que no es tan difícil ni utópico como creía en un principio. Es inevitable cometer errores durante alguna sesión, pero es algo que remendaremos con la práctica.

No hay comentarios:

Publicar un comentario